Para don Manuel García Ferré
Agrego algunas fotos y un video de cuando, gracias a la invitación de un grupo de sus amigos, tuve la oportunidad, en 2010, de asistir a un almuerzo en su compañía y poner un ejemplar con las aventuras de Orquídeo Maidana en sus manos. Un momento inolvidable para mí, porque ese libro, en ese momento, representaba todo el agradecimiento y el afecto por quien fue muy importante, decisivo diría, en mi carrera y en mi vida.
Con usted se va un gran pedazo de la infancia de varias generaciones, pero no se van sus personajes. Aquí seguirán alegrando la vida de chicos de todas las edades todas sus entrañables criaturas: Hijitus, Pi-Pío, Larguirucho, Anteojito, Trapito y tantos, tantos más...
¡Hasta siempre, don Manuel!
Un gran momento, junto con el querido Pelusa Suero